🌉 37. El puente invisible

Un cuento de misterios, risas y descubrimientos

Había una vez…
una tarde en que el grupo de amigos llegó a un río inmenso.
El agua corría clara como cristal y reflejaba el cielo como un espejo. 🌊✨

—¿Y ahora cómo lo cruzamos? —preguntó Cata 💖.
—Dicen que aquí existe un puente invisible —explicó Chispa—.
Pero nadie sabe cómo hacerlo aparecer.

Cruco 🦁 rugió fuerte para probar,
pero el río solo le devolvió un eco.
Rojuela 👑 encendió una llama roja,
pero el fuego se apagó en el agua.
Nufi ☁️, entre risas, se tiró haciendo “plop”…
y terminó empapado. ☁️😂

—Nada funciona —dijo Cata, cruzada de brazos.

🌼 La risa de Feli

De pronto, Feli empezó a correr tambaleante por la orilla,
persiguiendo un pez saltarín. 🐟
Tropezó, se cayó sentada en la arena,
y soltó una carcajada tan fuerte y pura que contagió a todos. 🌼😂

El aire vibró.
El río comenzó a brillar,
y poco a poco apareció un puente luminoso hecho de risas,
formado por notas musicales y carcajadas. 🎶🌉

—¡Lo encontramos! —gritó Cata emocionada.

🌟 Cruzando juntos

Uno por uno fueron caminando sobre el puente:

·       Cata, llevando de la mano a Feli.

·       Chispa iluminando el camino con destellos de colores.

·       Nufi, todavía chorreando agua, haciendo reír a todos con sus caras graciosas.

·       Cruco, con paso firme, rugiendo como un tambor que marcaba el ritmo.

·       Rojuela, dejando atrás un calorcito que los hacía sentir seguros.

Cada paso soltaba un sonido:
ja, je, ji, jo, ju
y el río entero se llenó de música y alegría.

💞 El descubrimiento

Cuando llegaron al otro lado,
el puente comenzó a desvanecerse lentamente.
Cata abrazó a su hermanita y dijo:
—Gracias, Feli. Sin tu risa nunca lo hubiéramos visto.

Feli sonrió orgullosa:
—¡Risa mágica! 🌼✨

Chispa agregó:
—La alegría verdadera siempre abre caminos invisibles.

🌙 El regreso

Al mirar atrás, ya no había puente,
solo el reflejo del cielo en el río tranquilo.
Pero todos sabían que, cada vez que rieran de corazón,
el puente volvería a aparecer para guiarlos.

🌉✨ Y colorín colorete,
este cuento de risas y caminos mágicos… ¡se terminete!

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